Mirando al cielo de Europa

Última jornada de esta temporada tan larga, extraña y dura. Llegaba tu/mi/nuestro Sevilla a Cornellá-El Prat con los deberes casi hechos pero con la obligación de ganar y optar a la 5ª plaza que nos quita de jugar fases previas. Y porque es mejor quedar 5º que 6º o 7º ¿no?

Con Kanouté, el jugador y la persona más grande que se ha puesto la camiseta sevillista, en la convocatoria. Kanouté se encontraba en Lyon en el entierro de su padre, Kanouté no estaba convocado por razones obvias, pues Kanouté  de motu proprio decide coger un avión y ponerse a disposición del Club para este partido.

Junto a Kanouté, arriba Negredo, el máximo goleador nacional. Por la derecha Alfaro, en el medio Romaric y Medel, por la izquierda… Luis Alberto. Debut como titular del futuro “crack” sevillista. El resto del equipo lo mismo, lo que las lesiones nos han permitido. Con la vuelta de Sergio a la que fue su casa hasta hace muy poco tiempo.El partido no podía empezar mejor para nuestros intereses, corría el minuto dos de partido cuando Alfaro entra por banda derecha, su balón atrás lo remata Negredo con su pierna mala desde la frontal del área haciendo el 0-1. Su 19º gol en Liga, colocándose como el máximo artillero nacional del campeonato. ¿Bailó una sevillana?

Por su parte el Espanyol tenía sus ocasiones, todas ellas protagonizadas por su delantero. En la primera Varas manda el balón a córner y en la segunda es SQD el que desde el suelo evita el empate.

Llega el minuto 16, y mientras los sevillistas corean al cielo el nombre de Antonio Puerta, todo Cornellá-El Prat aplaude. Unos momentos ya vividos pero que siguen siendo muy emotivos.

Tras esto, llega la jugada rara de la primera mitad, Romaric mete un balón en largo a Kanouté que parte en posición reglamentaria y cuando parece que se queda sólo, el Gigante de Malí coge el balón con la mano. El árbitro no le amonesta y comunica al Delegado que no está permitido el uso de silbatos, razón por la cual Kanouté pensó que estaba en fuera de juego y paró la jugada.

El Espanyol seguía atacando, Varas tuvo que mandar a córner un disparo desde dentro del área. Y minutos más tarde, Medel saca el balón en la línea con la cabeza tras la salida de un córner. Menos mal que no estaba Fermín y su banderín, que si no seguro que hubiera hecho de las suyas… la pelota no entró.

En el minuto 21 se repitieron los gestos emotivos, en esta ocasión homenajeando a Jarque.

Pasan los minutos y no conseguimos finalizar ninguna ocasión y en cambio ellos a la contra nos creaban cierto peligro. Pero poco a poco vamos acercándonos a la portería rival. Una jugada entre Luis Alberto y Romaric acaba en centro templado del costa marfileño. Poco después, un balón de cabeza de Negredo a Kanouté, cuyo centro al corazón del área es despejado cuando nos disponíamos a rematar.

Y tenía que llegar el segundo de la noche. Luis Alberto cae a banda, pisa el balón y lo cede  a Romaric, que de primera tira la pared con el canterano. Éste metiendo cuerpo se zafa del defensa y su pase con el exterior deja sólo a Kanouté que solo tiene que empujarla. 0-2, al cielo, esta vez las manos no duraron mucho tiempo señalando al tercer Anillo. Sus manos se fueron rápidamente a secar esas lágrimas que brotaban por su cara, dolor y emoción, y un claro “Va por ti Sara”.

Con este resultado llegábamos al descanso, tras el cual siguieron los mismos jugadores sobre el terreno de juego.

Pero otra vez salimos despistados, relajados y pronto nos hicieron el 1-2. De un saque de banda, un despiste, un balón que acaba colgado al área y un delantero que se adelanta a todos.

Y ahora sí que llegaron los fantasmas de Pamplona. Dabo tiene que enviar a córner cuando ya encaraban portería. A la salida de ese córner, Varas tiene que despejar con los pies un remate desde el punto de penalti. Sufríamos como siempre, pero a la contra llegó la tranquilidad…momentánea.

Contra por la banda derecha, balón que conduce Cáceres. El uruguayo centra al área y allí aparece Negredo, el “Tigre de Nervión”, que de semivolea haciendo un escorzo en el aire remata de tremendo zurdazo haciendo el 1-3. Su gol número 20 en Liga, confirmando su estado de forma y reivindicándose como mejor delantero nacional. Ahí están los números. Cosas.

Pero atrás seguimos siendo blandos, con muchas imprecisiones y nervios. En un balón a la espalda de los defensas casi nos recortan en el marcador.

Para tratar de contener al rival, Manzano da entrada  a Renato y sienta a Luis Alberto, que dejó detalles de mucha calidad. Aún así, los problemas atrás seguían. Y nos hicieron el segundo. Una contra por la izquierda que acaba con un centro al área, dónde el delantero se adelanta a los defensas y a la mala salida de Varas. Más nervios.

Menos mal que el rival estaba más atento a homenajes, y por momentos pareció no querer hacer mucho más daño. “Lo Pelat” saltaba al campo para despedirse del fútbol profesional, “Mago, genio…” se podía leer en varias pancartas. Aún así, seguimos sufriendo por lo justo del resultado y por el recuerdo cercano de las victorias perdidas.

Negredo pudo hacer su hat trick pero el balón al que él solo, por su fe y lucha, llegó, acabó en el poste tras un remate escorado y casi sin hueco.

Los minutos fueron pasando y el resultado no se movió. Todos ganamos, y el triple empate a 58 puntos nos beneficiaba, y nos daba la 5ª plaza liguera. Mucho ánimo a los aficionados del Depor, el sevillismo está con vosotros y os esperamos pronto de nuevo en Primera.

Como decían en el mundo de los toros, “No hay quinto malo”, y mucho menos si ese quinto es tu/mi/nuestro Sevilla. Con ese escudo con dos medias lunas que forman un corazón, con 11 rayas, blancas unas, rojas otras… y porque ya se sabe que te queremos tanto que estaremos siempre contigo, hasta en las victorias.

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